La obra describe la cultura, el arte y la música conjuntamente con las transformaciones provocadas por la Guerra Civil en la Lleida de inicios del siglo xx, siguiendo los recuerdos de un músico de la época, Ramon Bellmunt, y los relatos de personajes coetáneos como Josep Lladonosa —músico en su juventud—, Ricard Viñes, Enric Granados o Màrius Torres. Una recopilación, por tanto, de las grandes biografías musicales de Lleida, pero también un ejercicio para recuperar del olvido a los músicos modestos, los “perseverantes”, músicos de trinchera, arrinconados por el destino junto a los perdedores de una contienda que no querían, pero en la que tuvieron que tomar partido. Artistas que jamás perderán la dignidad y que encontrarán su fuerza y capacidad de resiliencia en la música. También están muy presentes las mujeres de espíritu rebelde que conquistaron los escenarios y los conservatorios, y que fueron las introductoras de la música en el ámbito familiar. En este contexto se vivió una transición generacional y estructural, cuando las orquestas clásicas y los músicos profesionales, muchos de ellos marcados por la guerra, ahora ya literalmente músicos de trinchera, tuvieron que convivir con los conjuntos musicales de jóvenes deseosos de expresar su arte, en un mundo en el que los contornos y los perfiles se diluyen.