El libro que tiene en las manos es el fruto de una larga amistad entre el ingeniero cartógrafo y geógrafo Werner Francisco Bär y el geógrafo físico que suscribe. Werner, profesor jubilado de la Universidad Goethe de Frankfurt am Main, nació en Mallorca y quiere darle una prueba de su estimación, como ya hizo con el libro «Das Kartenbild der Insel Mallorca vom Ende desde 15. Jhs. bis um 1700 – ein Vergleich aus kartographischer Sicht» (2004), posteriormente traducido al catalán y al castellano. Por mi parte, después de trabajar en el País Valenciano en la Universidad de Valencia, una vez alcanzada la jubilación, quiero resarcirme de una parte de lo que no había hecho por mi tierra. He aquí la razón de nuestra coincidencia, de un profesor alemán-mallorquín y de otro mallorquín-valenciano, algo tardía. Seguramente hay otros cuadros murales cartográficos de la Isla a los que no hemos tenido acceso, pero hemos creído que había que difundir lo que sabíamos de los tres ejemplares más significativos, confeccionados entre los siglos xvii y xviii. La sospecha de un patrón originario de Joan B. Binimelis que habría preparado el terreno permanece en el aire, sin confirmarse ni desmentirse. Habría que profundizar en las trayectorias de Antoni Verger y Joan B. Binimelis y sus relaciones.