Con esta guía se quiere hacer reflexionar sobre el trabajo como docentes y destacar la importancia de educar en hábitos de vida saludables desde edades tempranas. Cuando hablamos de salud hablamos de actividad física, sedentarismo, alimentación, descanso, abuso, etc. y de gestión de emociones, entre otros. Los y las docentes jugamos un papel crucial en la calidad de la experiencia educativa de los niños. Al favorecer la adquisición de hábitos saludables de por vida aportamos bienestar, salud y calidad de vida. Para conseguir este cambio de hábitos será necesario involucrar a toda la comunidad educativa y los docentes y familias tendrán un rol especialmente importante, porque se convertirán en modelos de hábitos saludables para los niños. Los objetivos de esta guía son facilitar herramientas a los docentes para incrementar la práctica de actividad física durante la jornada escolar, así como ofrecer herramientas a los docentes para trabajar la educación postural de forma transversal, visibilizar los múltiples aprendizajes transversales que se pueden dar a partir de la práctica de actividad física, favorecer la adquisición de hábitos saludables desde edades tempranas y hacer de las escuelas centros promotores de salud, piezas claves para, en sinergia con la comunidad, favorecer entornos más saludables para conseguir el desarrollo integral del alumnado.