Analizar el deporte como fenómeno social resulta una buena excusa para procurar entenderlo de manera diferente a como se entiende en las páginas de la prensa en general y en las de la deportiva en particular, o en los medios de comunicación de masas, es decir más allá de los espectáculos mediáticos más significativos de la sociedad moderna. La sociología del ocio y del deporte estudia el ocio y el deporte como fenómenos y hechos sociales, en especial en el contexto de las sociedades modernas o posmodernas, con un grado de complejidad significativa, en que la sociología puede ayudar a averiguar, desde la transversalidad, el papel real que juegan estas actividades individuales y sociales. El ocio y el deporte han adquirido una importancia creciente y son asumidos como elementos imprescindibles para la consolidación de un régimen de vida de calidad, democrático, como un derecho básico de todas las capas de población, no sólo un signo de bienestar de las clases acomodadas u ociosas —golf, hípica, deportes náuticos, entre otros— además de haberse convertido en un elemento económico y de consumo de primer orden.